Mi Welita Zoila Emilia Del Carmen Gaete Gaete. Te amo 4ever.

Madre de ocho, abuela de 20 y tantos, bisabuela de varios…. tatara abuela de…
La pena y la resaca de madrugada no me dejan ser preciso con los números.  

El llanto en silencio entrecortado, rozando los hombros de tíos y las manos de tías, sumado al eco eterno del canto a lo divino de las entrañas de Colchagua, me tienen todavía dentro de una niebla.

La madrugada del 6 de mayo sonó el teléfono y el mundo se nos puso patas arriba. A los 97 años la welita partía.

¡Dos días antes del día de la madre por la cresta!

¡Por la rechucha calendario!

Sabíamos que estabas enfermita y que en cualquier momento sucedería, pero aún así fue un hachazo en nuestra conciencia.

Recomponiéndonos del impacto, salimos rumbo al campo como lo hemos hecho toda la vida, pero esta vez para cerrar una era.

Para despedirla en la misa de la Iglesia, Tía Nena primero y la Tía Dominga después, me pidieron que escribiera algo…

Y esta vez, más que soltar el torbellino de recuerdos que se hunden en mí (aunque al final igual lo hago), preferí entrevistar a los hijos de la weli y a sus nietos y nietas, en un rápido ejercicio de recuerdo colectivo.

Faltaron algunos que no pillé y la hora apremiaba.

Les pedí que definieran a la Weli en una palabra y que escogieran un recuerdo. Sé que les pedía un ejercicio difícil y doloroso como pocos, pero también siento que es un ejercicio necesario porque nuestras palabras son el adobe de nuestra memoria, también el fuego que nos reúne y nos cura.

Esto es lo que salió:

Gracias a todos y todas quienes nos acompañan esta tarde tan triste y tan llena de gratitud, que nos reúne para despedir a Zoila Emilia del Carmen Gaete Gaete.

La parte de los niet@s

Luis Orellana Castro

Elige la palabra Abnegación y recuerda sus queques.

No puedo dejar de mencionar sus queques. Sus inolvidables queques llenos de calorías de cariño. Que cuando cruzaban la 5 sur en manos de mi tío Juan desde Peralillo a Maipú, me hacían correr y saltar gritando: “Llegó mi tío kuan del campo y me trajo kueke de la welita”. Eso era la felicidad.

Andrea Castro Yévenes

Va por la palabra Resiliencia y recuerda una mesa de todos gigante y larga, llena de sonrisas y oncecitas con sopaipillas pasadas.

Israel Sánchez Castro

Elige la palabra Matriarca..

Y recuerda cuando en el patio trasero de la casa antigua, la welita salía a alimentar a los pollos lanzando granos y gritando: “Pollito…pollito”.

 Miguel Angel Castro Yévenes

Dice Familia.Y recuerda las decenas de veces que la abuela lo contuvo con palabras, abrazos y silencios.

(Porque los silencios también contienen).

 Felipe Castro Cariz

Elige la palabra Insistente y recuerda sus huevitos revueltos.

Annia Sánchez Castro

Dice Amor de mamá y recuerda mantelitos pintados, los botines de lana que tejía para recibir a las nuevas generaciones, bufandas y gorritos que quedan en nosotros, en nuestros cajoncitos del alma.

Juan Pablo Quiroz Castro

Opta por la palabra Luchadora

Y recuerda la “Yemita pará” (huevos fritos) y a la welita diciéndole: “Ya está comiendo bollas”, porque mi hermano tenía la sana costumbre de comer cebolla cruda debajo de las mesas.

Fernanda Sánchez Castro

Elige la palabra Grandeza

Y vuelve a recordar los gritos de “Pollito, pollito…” que afortunadamente grabé un día y aquí lo pueden escuchar.

La voz de la welita Zoila diciendo pollito.

Bisnieto Nico

Dice: Matriarca maternal

Y recuerda que nunca nadie se iba sin comer de su mesa generosa, sin importar quien fuera…

 Pilo (Claudia Castro Pérez)

Elige Amor

Y recuerda que Zoila fue su mejor viejito pascuero. Y vuelve a recrear cuando la acompañaba a los Rosarios del alba…

Chabe (Isabel Castro Pérez)

Dice Reina

Y su mayor recuerdo es haberla criado.

Juse (José Patricio Reyes Castro)

Dice imitando su vocecita: “Juuuuuseeee…”

Y recuerda cuando salía a jugar fuera de casa y caía la tarde y sentía el aire fresco. En medio de esa atmósfera escuchaba: “Entrate Juse, a tomar once…”.

Chinita (Karina Reyes Castro)

Imprime la palabra Cariño

Y recuerda que siempre siempre fue atenta y la mejor anfitriona del mundo.

 Mila (Emilia Castro Pérez)

También se la juega por la palabra que contiene a todas: Amor

Y también recuerda la Navidad.

Roxana Castro Pérez

Se suma con la palabra y el recuerdo: Amor y Navidad  y agrega que era atenta y preocupada.

María José Castro Pérez

Dice Madre abnegada

Y recuerda que ella le enseñó a ver la hora.

Matías Castro

Dice la palabra frase: Apoyo desde el día uno

Y recuerda que la acompañaba a comprar sus cositas a la feria, caminaban (la welita caminaba muy rápido levemente inclinada hacia adelante, a veces parecía que se podía caer) y volvían a casa a preparar y disfrutar una cazuelita.

 LA PARTE DE LOS HIJOS E HIJAS

María Elena Castro Gaete

Pronuncia la palabra Amada

Y con voz entrecortada recuerda que la welita le daba un billetito a cada nieto que entraba a la enseñanza superior….

También que a ella le regalaba un Sahne Nuss y diez luquitas…También invoca su manos, “hermosas y solidarias”, y agradece poder haber sido acariciada por ellas.

Tío Juan Castro Gaete

Dice: Perfecta

Y recuerda la enseñanza de valores como el respeto y la responsabilidad.

Benito Castro Gaete

Elige las palabras Paciencia y valentía

Y recuerda que siempre puso la otra mejilla.

Ester Castro Gaete

Va por la palabra Apañadora

Y recuerda los inolvidables viajes a Cartagena en patota.

Ana Castro Gaete

Dice “Para mi Es todo”. Y recuerda cuando ella se acercaba a la welita. Y juntaban sus narices moviéndola como los esquimales en un gesto cariñoso y Zoila le decía: “No me echis moco..”.

Dominga Castro Gaete

Dice: “Todo para mi, bondadosa y cariñosa”. Y recuerda su licenciatura cuando su madre la acompañó a recibir sus diploma al escenario, porque era de ambas.

José Ramón Castro Gaete

Se va por el clásico: “Madre hay una sola” y esta tarde esa frase la sentimos más que nunca. Y recuerda cuando le salvó la vida al rescatarlo del borde de una noria, de la que colgaba afirmado de sus pequeños dedos.

Tío Nano

También elige la palabra “Luchadora” y recuerda lo que representa su madre: “Para mi es el cariño más grande que he tenido”.

Yernos y nueras

Tío Nino
Elige la palabra Sacrificio y recuerda cuando le decía “Persignate nomas…” con un tono entre mandona e irónico.

Tía Tere
Dice:”Unión”
Y recuerda que Zoilita le ganaba en la sopita de letras.

Tío Fernando
Se lanza una frase poderosa: “Mi segunda mamá”
Y recuerda que tiene un chaleco nuevecito hecho por ella ella para estrenar.

Tío lucho
“La mejor suegra”, dice el tío.
Y con voz entrecortada recuerda: “Un platito de  porotos”.

Al cierre de estas palabras yo po welita linda, tu negrito, tu totito.

Como palabra-frase elijo: “Amor y calorías de cariño, tal vez el lado feliz de mi infancia”.

Foto robada a una prima…

Y como recuerdo pondré varios, aprovechando que yo soy el que ha escrito XD.

Recuerdo tus historias, tus narraciones increíbles…especialmente cuando me contabas que galopabas los campos, haciéndome sentir la libertad del campo y del viento.

Y destaco tu humor y tu ironía:

Hace un par de años te mostré una Loica que me tatué en el brazo y te dije: “Mira welita me tatué está loica para ti…se llama Zoilaloica…”.

Pensé que te haría gracia mi tatuaje, pero me miraste con cara rara (WTF).

Te repetí el chiste y me dijiste: “Pero esa loica es muy re chica..”

Traté de dar una excusa justificando el tamaño y me lanzaste un: “y tampoco canta pue…”.

Nos reímos. Me miraste achinando los ojos directamente a los míos y moviste la cabeza diciendo “cabro loco”…

Tantas veces dijiste eso frente a tanta cagada que me mandé por allá en el campo de mi infancia…

Y si bien te enojaste porque tiré a un chiquillo al canal, destrocé  un cercado de la vecina para hacerme una jaula de conejos, tiré a un gato a la letrina y hacía trampas a tus pollos y patos tipo correcamino (ACME)…

Siempre perdonaste mis maldades, amándome y me hiciste las mejores papas fritas del universo. Grandes y crujientes. Frente a las escuálidas papitas de mi mamita.

Descansa en paz viejita hermosa, que tu viaje sea leve. Que tu amor y recuerdo nos permitan seguir viviendo…hasta que un día golpeemos juntos.

Gracias Abuelita linda hermosa. Gracias por hacer de cada momento un regalo.